Mantengo mi viaje topándome con un río sonriente, un gurú esquelético en su interior baila danzas extrañas mientras sus seguidores se mantienen sumergidos al compás de la tabla y el citar que un elefante de 8 brazos toca enérgicamente.
Mantengo mi paso como un errante extraño que mira el mundo a través del ojo de Ra. Visiones multicolores y destellos es lo que veo en la gente que me sonríe a lo largo de mí peregrinar, es así como si pudiese ver en su interior un sufrimiento opacado por su luminosa alma y su destellante y dorado corazón.
No es de extrañar que en el camino nos topemos con objetos vacíos que nos hacen perder el tiempo, mas aun por mas vacío que se encuentre vale la pena esperar unos segundos para ver si vale la pena guardarlo o dejarlo en donde estaba, algunos prefiero apartarlos del camino para que los viajeros que vienen detrás de mí; no pierdan su ruta y su tiempo.
Ha el tiempo, invento del hombre el cual solo 2 personas son capaces de detener cuando se ven por primera vez, curiosamente estos pueden guardar mas magia que una lámpara maravillosa o un genio en pijamas. No se a debraye cierto que pase cuando estos se toquen o se encuentren juntos, me gusta creer en las reacciones efervescentes sumados a los destellos luminosos inter oculares humanos, todo un universo reducido a un iris que guarda historias, vivencias y magia.
El camino del guerrero esta sumado al camino de la vida ciertamente es obvio; caminos largos , cortos, a veces estrechos o sinuosos , empedrados o lodosos pero el guerrero sabe que camino es el correcto, así como un ave conoce con certeza que su nido domina la copa del árbol mas grande.
Una nube gris me mira desde arriba llorando, sacia mi sed con su llanto , el aire silva melódico mientras atraviesa mis ropas mi camino esta frente a mi y no le veo fin, mas no me asusta , lo miro con respeto y empuño mi bastón cierro mis ojos y lo sobrevuelo, dejo que mi alma vuele con el aire , me vuelvo uno con el sonido universal, es como si fuera un tampura y tablas rítmicas marcaran mi velocidad, el citar me eleva y aumenta el brillo de mi alma mientras el sintetizador alimenta mi cerebro que se vuelve un todo y un nada al mismo tiempo para asi conocer mi camino.
Ignoro al ave que desde el cielo presume de su logro, con un canto meloso, atento miro a la liebre que corre por el camino ya que conoce mas rutas , sonidos, lugares y peligros mas que yo.
Los sabios animales tienen su ruta, a veces es bueno conversar con ellos, mas no fiarse de todo lo que nos dicen, les digo como caminante no hay mejor consejero que el mismo viento, que trae el soplo de lugares viejos, olvidados; de rutas luminosas y vírgenes que buscan contarnos mil historias, historias que vamos trazando con nuestras vidas, andares, amores, metas y sueños.
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